Cada segundo importa.

domingo, 14 de agosto de 2011

Te necesito ahora.

Son las dos y media de la madrugada, he perdido el control, prometí no llamarte, pero necesito oir tu voz, porque no se alguna vez habré pasado por tu mente, pero tu lo haces contantemente por la mía.
Supongo que prefieres que sufra, a que no sientas nada, absolutamente nada, algo duro de llevar, como ser el causante de que alguien llore, lo pase mal, y no pueda dormir, porque tiene a alguien metido en la cabeza imposible de sacar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario