Cada segundo importa.

martes, 22 de marzo de 2011

Bebe rubia la cerveza para acordarse de su pelo.

No me gusta expresar mis verdaderos sentimientos, y si lo hago, son en contadas ocasiones. Me cuesta identificar lo que siento, y para cuando lo hago, las emociones se me escapan a borbotones de la boca, el corazón y las manos. Me gusta decir verdades como panes, parecer una loca o que en ocasiones me llamen satánica. Soy de las que gritan por no llorar, bailan en medio de clase, y bajan los ojos con un chico guapo. No tengo una determinada risa y va cambiando con las estaciones. Sueño con cada libro que leo, vivo una banda sonora en cada momento y escribo hasta en las servilletas de los cafés. No soy tan buena bailando, ni pintando ni posando, pero bueno. Siempre he querido dar la vuelta al mundo. Adoro las luces, el movimiento y los vasos a rebosar de alcohol. Soy, camaleonica, cotilla, y mataría por las personas que más quiero. 



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